Uno de los aspectos menos conocido por los profanos en la materia y que es importante tener en cuenta a la hora de llevar a cabo travesías en velero es el mar de fondo. El mar de fondo no solo es importante por cómo afecta en la navegación, sino que también tiene un gran impacto en la ecología marina.
Si estás pensando en llevar a cabo un viaje en velero y quieres conocer más acerca del entorno que te va a rodear, en este artículo vas a encontrar todo lo que necesitas saber sobre el mar de fondo. El mar de fondo se conoce también como mar de leva y básicamente se trata del movimiento de las olas que se propaga fuera de la zona en donde se ha generado.
Hasta hace unos pocos años el mar de fondo ha sido uno de los grandes misterios del mar. Esto se debe a que es posible que se desplace hasta lugares muy alejados de donde se ha generado, lo que suponía todo un misterio para los marineros de eras anteriores.
A día de hoy sabemos que las olas del mar de fondo cuentan con un período regular y también tienen crestas suaves. Otra de las características que mejor las define es que la onda de estas es superior a su altura, por lo que se acaban presentando como crestas redondeadas que no se llegan a romper nunca en el mar.
Cómo se produce el mar de fondo y cómo afecta a nuestra navegación
El mar de fondo se produce a través de una combinación de factores, la fuerza del viento, la duración y el fetch. La fuerza del viento es la rapidez con la que el viento sopla en la superficie del océano mientras que la duración es el tiempo que lo hace sin interrupción. Por su parte, el fetch es la distancia que el viento recorre en la superficie del mar sin que sea interrumpido por obstáculos.
Cuando el viento sopla sobre la superficie del agua se produce una fricción y, fruto de esta fricción, la energía se transfiere del viento al agua. Esto termina por provocar una cresta ascendente que se acaba convirtiendo en una ola. Cuando este fenómeno se produce con tiempo y distancia de forma sostenida se acumula una gran cantidad de energía bajo la superficie del océano. Estas ondas viajeras son capaces de recorrer miles de kilómetros y se conocen como oleaje.
Este mar de fondo afecta de forma muy negativa a la navegación. En primer lugar, dificulta el control de la embarcación, sobre todo cuando se trata de una embarcación pequeña. Las olas provocadas por el mar de fondo provocan que la embarcación se tambalee, por lo que puede afectar tanto a la dirección como a la velocidad además de hacer que sea más difícil atracar la embarcación.
Finalmente, el mar de fondo también puede provocar daños estructurales en la embarcación. Debido a que las olas pueden golpear el barco, este fenómeno marino puede provocar daños por debajo de la cubierta afectando también a los equipos de la embarcación o su carga.
Cómo navegar de forma segura con mar de fondo
En primer lugar, es muy importante tratar de anticiparse a las condiciones meteorológicas para saber realmente que estamos navegando o que vamos a navegar con mar de fondo, más adelante veremos cómo se puede saber.
Si vas a navegar con mar de fondo es importante navegar con mucha cautela. Lo primero es que es necesario reducir la velocidad para facilitar el control de la embarcación. De cara a no perder el control es importante buscar tierra como referencia ya que se corre el riesgo de encallar o resultar volcados por el oleaje.
Si las olas son fuertes, una técnica recomendada es atacar las olas por las amuras y tratar de mantener la embarcación en posición perpendicular a las olas. Esto sirve para reducir el riesgo de que se puedan producir peligrosas escoras. Lo que se debe evitar por completo es romper directamente contra las olas.
También es importante evitar las maniobras bruscas y, además, se recomienda que se amarre bien la carga o se evite que cualquier objeto se pueda desprender o caer dentro de la embarcación debido al movimiento.
Cómo puedo saber si hay mar de fondo
Son muchos los factores que pueden influir en el mar de fondo. Es importante señalar que también algunos destinos náuticos son más propensos a sufrirlos, por lo que también es importante conocer dónde se viaja.
Uno de los aspectos que nos puede señalar que hay mar de fondo es cuando la navegación se hace más pesada. La embarcación se mueve de forma arrítmica y, por lo tanto, se genera una mayor sensación de mareo.
Las olas del mar de fondo suelen ser bastante más largas que las olas generadas por el viento, por lo que también puede ser un indicativo de mar de fondo. Además, la presencia de ondas que llegan desde otra dirección distinta al viento local también puede ser un importante indicativo.
Finalmente, las ondas del mar de fondo no se suelen romper. Si estás navegando sobre olas que se deslizan de forma suave sobre la superficie del agua y no rompen es posible que estés navegando con mar de fondo.
El papel del mar de fondo en la ecología marina
El papel del mar de fondo en la ecología marina es muy importante. Para empezar, este fenómeno marino ayuda a distribuir la energía y los nutrientes a lo largo de los océanos, lo que ayuda a mantener a las poblaciones de organismos marinos en diversas zonas.
Otro de los aspectos más interesantes del mar de fondo es que ayuda a mezclar las aguas de los océanos. Gracias a este fenómeno se distribuyen mucho mejor los nutrientes y también ayuda a los organismos marinos a dispersarse por alta mar. Gracias al mar de fondo algunas especies marinas tienen más facilidades para colonizar ciertas zonas a las que tardarían mucho tiempo en llegar.
Por otro lado, no todos los aspectos del mar de fondo son positivos. Debido a toda la energía que arrastra a su paso, el mar de fondo puede erosionar el fondo marino con el paso del tiempo. Esto es bastante negativo para los ecosistemas marinos ya que, como puedes imaginar, esta erosión puede acabar con varios hábitats y también provocar el desplazamiento de ciertas especies.
Tanto de forma positiva como de forma negativa, no cabe duda de que el mar de fondo tiene un impacto muy importante en la ecología marina por lo que es importante comprenderlo.