El Doblón navegando entre icebergs en la Antártida!
Alegría Marineros!!
Y de las espesas brumas de los siglos pasados, desde un lugar único y lejano, donde todo es blanco y azul, sin embargo lleno de tonos y sensaciones, donde el silencio es distinto, las distancias son diferentes y el tiempo tiene otro ritmo…
Busco el momento para escribiros e intentar transmitiros las sensaciones que se viven por aquí…
La luz de la Antártida
El día es infinito, no hay momento para la oscuridad, eso hace que nuestro reloj biológico despierta a nuevas sensaciones. Aquí se duerme porque tu sensación es la de tener el deber cumplido… No hay lugar para dejar nada para mañana pues el mañana no llega, siempre estás en él…
Noto que a la tripulación les pasa algo muy parecido, la luz es vida y la vida es alegría…
Alegría Marineros, bienvenidos al maravilloso mundo del Doblón!
Me hubiese gustado escribiros más a menudo, me acuerdo mucho de todos vosotros pero no paran de pasar cosas…
Navegando entre icebergs!
Hace ya unos días, que no noches, que zarpamos de isla Decepción, navegamos rumbo sur hasta la península Antártica, los días son limpios, claros y luminosos. Navegamos unas 70 millas hasta caleta Cierva, al principio no había hielos ni icebergs,(esta es la primera vez que vengo en diciembre) por un momento pensé que en esta época no había hielos flotando por el canal, pero fue aproximarnos a Caleta Cierva y se convirtió en una lucha maravillosa contra el hielo, sus elementos y acabamos navegando entre icebergs.
Qué Maravilla ir avanzando a través del hielo a menos de 2 nudos zigzagueando entre banquisas de hielo. Algunas veces no había más remedio que atravesarlas (se notan las mejoras que realicé en el casco del Doblón) para navegar entre hielos, no pudimos llegar hasta la base Primavera, el hielo estaba empezando a cerrarse. Aún así avanzamos lo suficiente como para quedar satisfechos y poder disfrutar de una comida en cubierta quedando a la deriva entre banquisas e icebergs de tamaño medio. Estos días bajo el sol Antártico, simplemente están siendo maravillosos.
Al terminar la comida, continuamos rumbo a Bahía Charlotte (hay que tener en cuenta que zarpamos desde Decepción casi ya 20 horas antes).
Es maravilloso viajar y navegar con navegantes, pues conseguimos disfrutar y optimizar los tiempos.
Navegamos durante varias horas entre hielos de vuelta hasta llegar al estrecho de Gerlache, a mar más abierto y se pudo aumentar la velocidad.
Viajar a la Antártida
No quiero continuar sin deciros que nos hemos cruzado con varios cruceros de esos que son capaces de llevar a más de 500 personas y ellos no son capaces de adentrarse en las entrañas Antárticas como nosotros, sin ninguna duda os tengo que decir que viajar a la Antártida en crucero o en velero es como ir a dos lugares diferentes, lo veo y noto en las caras de mis tripulantes. Yo quizás ya me estoy acostumbrando a estar por aquí, ellos están asombrados y emocionados de verdad que es increíble recibir su ilusión, para mi es como si me cargasen las baterías sintiendo como están merece la pena luchar y sufrir como lo hace mi equipo para conseguir esto.
La navegación
Seguimos navegando por el Gerlache a media travesía se levanta viento del sur, unos 20 nudos. Esto hace que el hielo costero se avalance sobre el canal y lo coloniza de hielo. Tuvimos que estar durante varias horas esquivando hielos e icebergs hasta que la orografía de la costa cambió y el viento amainó…

Seguimos navegando hacia Carlota bay… pero no sin antes encontrarnos con una foca Leopardo encima de un pequeño hielo, impasible a nuestra presencia, pudimos acercarnos desde el barco hacer cientos de fotos, recordando y respetando su armonía, aun así nos miraba y la dábamos exactamente igual. Estas focas están en lo más alto de la cadena de depredadores y no nos temen.
Ballena a la vista!

Seguimos navegando rumbo suroeste entre hielos, icebergs y ballenas hasta que llegó una ballena, yo creo que algunos animales Antárticos son capaces de percibir nuestra ilusión y energía pues parece que nos adoptase. Se dedicó a darnos un espectáculo de su belleza, nos enseñó cada ángulo de su perfil, nos mostró su cola en más de diez ocasiones y se fundió con una puesta de sol simplemente antártica y maravillosa, tengo que decir que volví a ver el rayo verde…
Foca Leopardo
Seguimos navegando, el hielo se estaba cerrando, apareció otra foca leopardo, ya no daba tiempo a estar con ella, quedaban pocas millas para el fondeo después de casi 2 días navegando a turnos. Aunque no se hace de noche, la temperatura baja muy deprisa, nos turnamos en proa para avisar del hielo y buscar la mejor derrota.

Era impresionante ir apartando hielo, viendo como el cielo y la mar se ponían color fucsia… Al fin llegamos a Carlota bay, pudimos fondear, dormimos como a las 4 de la mañana. Ya salió el sol de nuevo y esta mañana nos despertó un iceberg apoyado en nuestro babor, ¡que maravilla! Lo apartamos, más bien nos apartamos nosotros y empezó otra maravillosa jornada que ya otro día os relataré…
Que feliz estoy de compartir estas vivencias con vosotros y con ellos, que gran equipo, no me gusta la vida en tierra…
Ya pronto hay que empezar a pensar en volver… Pero hoy no!!
Alegría marineros
Mi sueño es nuestro sueño, yo desde luego no quiero despertar…
La Antártida tiene una calma especial, esto es único e irrepetible, no dejes que yo te lo cuente, tienes que vivirlo…
4 comentarios
Ufff,,uff,,que abrumador relato gracias pedro jimenez torrecillas ,por compartir.
Gracias,y mejor regreso.
Muchas gracias Pedro por este bonito relato, sueño cumplido e istoria!!! Leer estas líneas me hacen vivir junto a vosotros ver lo que nos estás contando sentir el viento antártico…pero al acabar de leerlos me despierto y me doy cuenta que esto hay que probarlo!!! Algún día dejaré de soñar y os acompañaré y lo viviré!! Buena proa y buenos vientos navegantes!! Alegría Marineros!!!
Pedro,
Nuevamente muchas gracias por tus relatos,
Leo sistemáticamente tus «diario del capitán» y son tan descriptivos que me siento viajando contigo y la tripulación.
Una maravilla!!!
Un abrazo y espero el próximo post.
Grandes relatos Pedro, envidia muy sana da el oíros y por supuesto muchas ganas de aventura. Disfruten de este nuestro planeta y cuidame a mi queridísimo Higinio Guerra, vuestro compañero y nuestro capitán…ahora aún más experto!!!
Un saludo muy fuerte desde Tenerife y buena proa navegantes!!!